En este artículo te traemos una lista de las 20 mejores cosas que ver en Cracovia, ciudad imprescindible de un viaje a Polonia, y una de las más bonitas del país.
Fue capital del país durante más de 500 años, y tanto antes como ahora ha sido y es un importante centro financiero, científico, cultural y artístico. Suya es la Universidad Jagellónica, la segunda más antigua del centro de Europa, solo por detrás de la de Praga.
El centro histórico de Cracovia fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1978, y si la visitas seguro que te sorprenderá que, a pesar de su antigüedad, dispone de amplias avenidas y no de los habituales callejones estrechos y sinuosos de las ciudades viejas. Eso es porque en el 1241 fue totalmente arrasada por las tribus mongolas, y para reconstruirla se fundamentaron en los postulados más modernos (de aquella época) para trazar las calles.
Cracovia no es solamente una ciudad bonita que ver y visitar, sino que en sus alrededores tendrás el privilegio de hacer algunos tours y excursiones realmente únicos, como lo es la visita al antiguo Campo de Concentración de Auschwitz. Sin duda una visita dura pero imprescindible.
Mapa de las cosas que ver en Cracovia
Qué ver en Cracovia
Cracovia es una de las ciudades más bonitas que ver en Polonia, y por su tamaño es ideal para una escapada de fin de semana, aunque no descartes repetir.
A nosotros nos encantó.
Si te decides ten muy presente que tienes hasta 6 Free Tours, un tipo de visita guiada verdaderamente fabulosa. Elige cuál te gusta más, seguro que alguno se adapta a tus inquietudes o curiosidades.
Con todo, los recomendados y recomendables son: el Free tour por Cracovia y este Free tour por el Barrio Judío. Con uno y otro recorrerás los sitios imprescindibles.
Iglesia de San Adalberto
Plaza del Mercado y Lonja de los Paños, el edificio emblemático que ver en Cracovia
El punto central de Cracovia, y en torno al cual gira su casco antiguo, es la Plaza del Mercado.
Con sus 40.000 m² es la plaza medieval más grande de Europa, y en ella se comerciaba con telas provenientes de oriente, cuero, cera y con la sal extraída de las Minas de Wieliczka.
En el centro de la Plaza del Mercado se encuentra la Lonja de los Paños, llamado así porque el principal comercio de sus tiendas era el de telas.
La Lonja de los Paños es sin duda una de las mejores cosas que ver en Cracovia, y uno de sus edificios más representativos. Aunque el edificio inicial data del siglo XIV, su configuración actual ha sido objeto de sucesivas reformas hasta el siglo XIX, cuando se le añadieron las arcadas y la balaustrada neogóticas.
Torre del Antiguo Ayuntamiento
Otro edificio destacado de la Plaza del Mercado es la Iglesia de San Adalberto, la más antigua de Cracovia, y una de las más viejas del país.
Alrededor de la Plaza del Mercado, y también dentro de ella, se ubican otros edificios relevantes de los que te hablamos acto seguido.
Torre del Ayuntamiento
Pegada a la Lonja de los Paños, se levanta solitaria la Torre del Ayuntamiento, otro elemento que caracteriza el perfil de Cracovia, y una de las mejores cosas que ver.
Como su nombre indica, formaba parte del Ayuntamiento, hasta que este fue demolido para dejar más espacio a la plaza.
Su planta superior es accesible al público, y podrás alcanzarla y gozar de sus vistas tras trepar por 110 escalones, aunque lo cierto es que la panorámica no es tan espectacular como uno puede imaginarse.
Basílica de Santa María, una melodía cada hora
En una de las esquinas de la Plaza del Mercado se alza la Basílica de Santa María.
Exteriormente destaca por sus dos torres no simétricas.
Basílica de Santa María
La falta de simetría entre ambas se debe a que la torre más alta tenía funciones de vigilancia. Como reminiscencia de ese pasado, podrás comprobar como un trompetista (hejnal mariacki) toca cada hora en punto la misma melodía 4 veces, apuntando cada vez en una dirección y abriendo para ello distintas ventanas de la torre. Como anécdota, te darás cuenta de que la melodía se detiene abruptamente y de forma inesperada.
En su interior presta atención al elaborado retablo de madera y al colorido interior, tan distinto a las iglesias católicas.
Puedes subir a la torre más alta de marzo a octubre y disfrutar, aquí sí, de unas vistas que merecen la pena. El resto del año permanece cerrada al público.
Casco Antiguo o Stare Miasto
Aunque la ausencia de calles estrechas y sinuosas le resta misterio, vale la pena perderse por el Casco Antiguo de Cracovia, también llamado Stare Miasto, y que, como hemos dicho, fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
Podrás identificar fácilmente el casco histórico porque es todo lo que queda dentro del Parque Planty.
Piérdete y déjate seducir. Ninguna visita está completa sin practicar el valioso arte de callejear.
Castillo de Wawel
En el extremo sur del Casco Antiguo, está otra perla que debes ver en Cracovia: el Castillo Wawel (pronunciado Babel), que fuera residencia de reyes polacos durante centurias.
El lugar es estratégico, en lo alto de una colina y en la ribera del río Vístula, que servía de defensa natural a la vez que suministraba agua a los ocupantes.
Castillo Wawel
Actualmente, es uno de los mejores museos de Polonia.
Entre los atractivos del Castillo de Wawel que puedes visitar están los Jardines Reales, las Habitaciones Reales, el Tesoro, la Armería, Exposiciones sobre el pasado medieval y el pasado más reciente del Castillo, y las Cuevas del Dragón. Algunas de estas atracciones se pagan por separado, aunque puedes visitarlas todas conjuntamente y además acompañado de un guía en español con este Tour por la Colina Wawel, que también incluye la Catedral.
Catedral de Wawel, puzzle arquitectónico
La Catedral de Wawel, dedicada a San Estanislao, es uno de los edificios más destacables que ver en una visita a Cracovia.
Fue lugar de coronación de los reyes polacos, y su exterior es un extraño compendio de capillas adosadas construidas con materiales diversos que le da un aspecto de cierta anarquía y desorden.
Tal y como parece, las capillas fueron construidas en épocas sucesivas sin respetar una homogeneidad.
Catedral Wawel
Uno de sus elementos más destacados es la Capilla de Segismundo, considerada una de las mejores piezas de estilo renacentista fuera de Italia.
En el altar de la Catedral de Wawel podrás ver, también, reliquias del Papa Juan Pablo II, muy venerado por los polacos.
También son destacables las criptas, donde reposan los restos de reyes y personalidades polacas, o la inmensa Campana de Segismundo, que únicamente suena en ocasiones especiales.
Basílica de San Francisco de Asís
La Basílica de San Francisco de Asís es también un santuario notable. En el interior conserva unos hermosos vitrales.
El Papa Juan Pablo II solía venir a esta iglesia para ir a misa, y los últimos años de su vida los pasó en un edificio contiguo.
Parque Planty
El Parque Planty de Cracovia es probablemente el parque más original que puedas contemplar, puesto que envuelve el Casco Antiguo. Esto es así porque Planty se ideó cuando se tiraron las murallas que protegían la Ciudad Vieja, así que con el espacio vacío que la circundaba decidieron crear un parque de 3 km de longitud.
Recorrerlo no es solo un agradable paseo de una hora aproximadamente, sino que además discurre por algunos de los puntos más interesantes que ver en Cracovia, como el Castillo Wawel, la Barbacana o la Puerta Florián.
Puerta Florián
Puerta Florián, resto de la antigua muralla
Partiendo desde la Plaza del Mercado, una de las calles principales te llevará hasta la Puerta Florián, dedicada al patrón de la ciudad, y que es uno de los escasos vestigios que quedan de la antigua muralla.
La espectacular torre de granito rojo fue la principal puerta de acceso, y estaba conectada mediante un puente a la Barbacana, de la que os hablaremos acto seguido.
Barbacana, otro vestigio del medioevo que ver en Cracovia
Como que la Puerta Florián era el principal acceso a la ciudad, se estimó necesario construir un elemento defensivo extra, así que en 1498 se levantó esta espectacular Barbacana de ladrillo rojo, con más de 130 aspilleras.
Los polacos temían un ataque del Imperio Otomano que no llegó. No obstante, le dieron buen uso en sendos sitios del Imperio Austrohúngaro y de Rusia, más tarde.
Antigua Barbacana
La Barbacana se unía con la Puerta Florián mediante un puente fortificado. Aunque este puente sí ha desaparecido, en el suelo podrás ver las marcas donde estaba.
Colegium Maius
La Universidad Jagellónica es de las más antiguas de Europa, y el Collegium Maius fue su primera construcción.
Aunque el edificio fue adquirido por el rey Ladislao II en el 1400, unos años después fue reformado hasta el aspecto gótico actual, con el gran Patio Interior rodeado de arcadas. Puedes acceder a él libremente, lo que te aconsejamos. Al contemplar el patio, piensa que por allí pasó nada menos que Nicolás Copérnico, el alumno más ilustre.
Colegium Maius
Barrio Judío, una zona con encanto
El Barrio Judío de Cracovia será uno de los principales atractivos, tanto diurno como nocturno, y junto al Casco Antiguo y al Castillo Wawel fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
Inicialmente fue una ciudad independiente llamada Kazimierz en honor a su fundador, el rey Casimiro III.
Más tarde, y a medida que fue creciendo, se incorporó a la antigua capital polaca formando un barrio.
Barrio Judío
Hoy día, lo que se considera Barrio Judío alcanza la otra ribera del río Vístula, puesto que con la llegada de los nazis, los judíos fueron realojados del otro lado. Es allí donde podrás ver algunos monumentos emblemáticos de Cracovia, de los que hablaremos más adelante.
Repartidos por el distrito están el Cementerio Remuh y diversas Sinagogas que se merecen una visita, como la Sinagoga Vieja, Remuh, o la que era la llamada Sinagoga Popper, hoy reconvertida en librería.
Plac Nowy (Plaza Nueva)
En el corazón del antiguo Barrio Judío está la Plac Nowy (Plaza Nueva), un lugar imprescindible que ver en Cracovia.
En el edificio poligonal central se venden Zapienkankas, una especie de pan con elementos varios: champiñones, salchichas, remolacha, etc.
En los tenderetes que se montan alrededor del edificio central se forman mercados de productos cambiantes, desde antigüedades hasta comida, pasando por un mercado de palomas y conejos los viernes por la mañana.
En los edificios que circundan la plaza y en los alrededores abundan los locales de ocio nocturno, ideal para tomar una cerveza. En el Pijalnia wodki i piwa dicen que se sirve el mejor vodka-limón de la ciudad.
Edificio central en Plac Nowy
Plaza Central
Además de la Plac Nowy, la llamada Plaza Central es otro eje imprescindible que ver en el Barrio Judío de Cracovia.
De carácter animado, a su alrededor se concentran negocios de restauración y ocio.
Pasarás por ella seguro, aunque no quieras.
Vieja Sinagoga
La Vieja Sinagoga recuerda en cierta forma a las capillas de la Catedral Wawel. Al verla desde fuera parece una extraña aglomeración de edificios superpuestos sin ninguna armonía, aunque a la vez es parte de su encanto y toda la originalidad.
Construida originalmente en 1407, es el edificio religioso judío más antiguo de Polonia.
Sinagoga Vieja
Tras una reconstrucción parcial en el siglo XVI se la dotó de muros defensivos, puesto que formaba parte de la muralla defensiva de la ciudad de Kazimierz.
Ya no sirve como templo, pero sí como museo que informa sobre el judaísmo en el país.
Pasaje de la Película La Lista de Schindler
Cerca de la Nowy Plac y algo escondido, está un callejón que se ha hecho popular por una de esas cosas del cine.
El llamado Pasaje de la Lista de Schindler se hizo conocido a raíz de una serie de escenas que aparecían en dicha película.
Resulta fotogénico, tiene encanto, pero no deja de ser extraño eso del turismo de películas.
Pasaje de la Lista de Schindler
Fábrica de Schindler
La cuestión es que Schindler existió realmente, y la emotiva historia que cuenta la película está basada en hechos reales.
La Fábrica en la que el empresario ocupó a 1.300 judíos a los que libró de una muerte segura, se ha convertido hoy en dos museos distintos, uno de arte contemporáneo, interesante pero menos, y otro que es el que debes ver en tu visita a Cracovia y que trata sobre la historia de la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial.
Un lugar imprescindible, y una de las mejores forma de verlo es con esta visita guiada.
Plaza de los Héroes del Gueto o Monumento de las Sillas
El Barrio Judío, antes de la llegada de los nazis, se situaba justo al sur de la ciudad vieja. Durante la Segunda Guerra Mundial, y para separarlos más del resto de la población, los invasores les realojaron a la otra ribera del Vístula, no muy lejos de la Fábrica de Oskar Schindler.
Allí encontrarás una plaza con 37 sillas vacías apuntando en distintas direcciones. Cada una representa 1000 víctimas judías de la persecución nazi (se calcula que en Cracovia murieron unos 40.000 judíos).
Plaza de los Héroes
En uno de los extremos de la plaza hay un edificio gris que actualmente está ocupado por una heladería, pero que fue el lugar donde pasaban lista los invasores y escogían a aquellos que serían destinados a campos de trabajo.
En el otro extremo de la plaza, la Farmacia del Águila es un símbolo de la resistencia, puesto que el farmacéutico, que no era judío, era uno de los pocos que tenían permitido el acceso al gueto, y además de medicinas, llevaba con él correspondencia y otros objetos que le eran encargados con riesgo para su propia vida.
Auschwitz – Birkenau, la mejor visita de Cracovia
Aunque lo hayamos dejado para el final, Auschwitz es sin duda la visita estrella y la mejor de las cosas que ver en Cracovia.
Auschwitz no fue en realidad un único campo de concentración, sino que se construyeron varios en terrenos muy cercanos.
La visita más habitual incluye el acceso a Auschwitz I, que está a 1’30 horas de Cracovia. Es el campo mejor conservado, reconvertido en museo. Contiene los barracones, y buena parte de las instalaciones. Hay numerosos objetos personales y fotografías de presos, que por lo general no vivían más de 3 meses desde que entraban.
Acceso a Auswitchz Birkenau
Luego la visita continua hacia Auschwitz – Birkenau, un campo mucho mayor, donde se conservan las sombrías puertas con las vías del tren. Está a 5 minutos en bus desde el primero.
La visita total suele ocupar un día completo (unas 7 u 8 horas).
No hay mucho más que decir, salvo que merece mucho la pena aunque remueva y te deje un sabor amargo.
Es muy conveniente reservar anticipadamente para evitar las largas colas que se forman y sobre todo para poder disfrutar de un guía en español. En días especialmente concurridos la excursión se agota.
En Cómo visitar Auschwitz – Birkenau te contamos más, incluso cómo ir por libre.
Minas de sal de Wieliczka, otro esencial que visitar
A unos 40 minutos de la ciudad, encontrarás las Minas de Sal de Wieliczka, otra de las mejores cosas que ver en Cracovia.
La mina, de la que se sigue extrayendo sal, fue una importante fuente de riqueza para la región.
En el interior hay verdaderas obras de arte hechas de sal, incluso los candelabros son de este mineral.
Una catedral subterránea impresionante y original, y otro de los esenciales de Cracovia. Al igual que la anterior, es conveniente reservar anticipadamente porque llega a agotarse.
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Cómo moverse
A pesar de que la ciudad de Cracovia tiene 1 millón de habitantes, y con su área metropolitana llega al doble, el casco antiguo puede recorrerse a pie fácilmente.
Incluso el Barrio Judío, algo más alejado, puede alcanzarse andando, aunque harán falta unos 20 minutos.
En momentos en que estés cansado, o si quieres ir por tu cuenta a puntos más alejados (como la Fábrica de Schindler), puedes optar por tomar un taxi o, mejor aún, usar Uber. Efectivamente la aplicación funciona en Cracovia, y supone un descuento importante respecto del taxi.
Si vas solo y te manejas bien con el transporte público, esta alternativa será más económica, pero si viajas en pareja o con amigos Uber te va a facilitar mucho los desplazamientos.
Dónde alojarse en Cracovia
Todo lo que queda dentro de Planty es la ciudad vieja, y estarás cerca de las principales cosas que ver en Cracovia, así que cualquier alojamiento dentro de sus límites es una buena opción.
Si entre los límites del casco antiguo no das con nada de tu agrado, te recomendaríamos que dieras preferencia a la zona situada al este o sudeste, para estar cerca del Stare Miasto y de Kazimierz, que son los dos enclaves por donde más te vas a mover.
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