Como imágenes típicas de Alemania no dudaríamos en indicar la Puerta de Brandeburgo o los restos del Muro de Berlín, que se cuentan entre las Mejores cosas que ver en Berlín. También nos acordaríamos del espléndido Castillo de Neuschwanstein.

Y a la par de todos ellos está la pequeña y turística Rothenburg ob der Tauber, una preciosa localidad de poco más de diez mil habitantes, rodeada de murallas y torreones muy bien conservados.

En el centro histórico se suceden calles y callejuelas custodiadas por edificios de entramados de madera, siendo todo él un auténtico museo al aire libre.

Puedes ver Rothenburg ob der Tauber en un día, incluso en unas horas, pero es muy muy recomendable pasar una noche. No te arrepentirás.

Mapa

Y para preparar tu visita a Rothenburg en un día, te hemos preparado dos mapas.

El primero es la ubicación de los 12 lugares que no te puedes perder:

Y el segundo es el mapa turístico que te dan en la Oficina de Turismo de la ciudad.

Mapa Rothenburg ob der Tauber

Mapa Rothenburg ob der Tauber

¿Quieres descargarte el mapa turístico de Rothenburg en pdf? Hazlo desde aquí.

¿Vale la pena pasar una noche en Rothenburg ob der Tauber?

Empezaremos al revés de lo que estamos acostumbrados, tal es nuestro afán para que duermas en la ciudad.

Estuvimos en Rothenburg hacia el final de nuestro Viaje por Alemania, y ya teníamos la lección aprendida, como os contábamos en 11 Cosas que ver en Füssen y alrededores y Mejores cosas que ver en Bamberg. Tanto en Füssen como en Bamberg tuvimos el acierto de pasar una noche, y fue una gran idea. Mucho mejor que ir y volver el mismo día desde una ciudad más grande.

Con esa experiencia en nuestro haber, decidimos hacer lo mismo en Rothenburg, y una vez más fue la mejor decisión.

Es verdad que el casco antiguo no es muy grande, y puedes recorrerlo bien yendo en un viaje de ida y vuelta desde Núremberg o incluso desde Frankfurt o Stuttgart si madrugas.

Pero eso es lo que hacen la mayoría de visitantes.

Burgtor

Pasar una noche allí te permitirá recorrer las calles en casi completa soledad, sacar fotos sin apenas gente, y aprovechar la luz del atardecer, con sus suaves colores pastel. Lo mismo del amanecer, si te levantas temprano.

La experiencia es totalmente otra si recorres las murallas y las torres, o pasas por el mítico Plönlein, sin la molesta compañía de otros humanos.

En nuestro caso dormimos en el hostal Jugendherberge, discreto y al más puro estilo de hostal de juventud, pero instalado en un antiguo molino de lo más inusual. El desayuno es completísimo y el personal muy amable.

Hay hoteles para todos los gustos, y para ocasiones especiales los hay bastante más caros, como el Hotel Rappen. Tienes más opciones tanto en Booking como en Agoda, donde podrás contrastar ofertas.

Sea como sea, quédate con la idea principal: vale la pena dormir en Rothenburg ob der Tauber.

Breve historia de Rothenburg

En castellano el nombre significa Castillo Rojo sobre el Tauber, que es el río que circula al oeste. No obstante, el castillo, que había sido construido en el 970, se derrumbó tras un terremoto en 1356, y de él solo queda la Capilla de San Blas o Blasiuskapelle.

Los primeros asentamientos de población datan del año 1170, y se desarrollaron alrededor de la fortaleza.

En los siglos posteriores la ciudad ganó en prosperidad, y llegó a ser una de las veinte más grandes del Sacro Imperio Romano Germánico.

Antiguo Molino, hoy Albergue de Juventud

En la Guerra de los Treinta Años Rothenburg fue asediada y muchos ciudadanos huyeron. Los pocos que quedaban fueron asaltados por la peste pocos años después.

Esa lamentable secuencia de hechos es la suerte de nuestros días: la ciudad empobrecida se vació de habitantes y dejó de crecer, lo que hizo que se mantuviera su estado hasta lo que podemos ver en Rothenburg hoy día.

Durante la Segunda Guerra Mundial fue escenario de un momento curioso. Asediada por los aliados, el general de las tropas atacantes había visitado en una ocasión la ciudad y la recordaba muy hermosa. Así que propuso no atacar si los defensores se rendían. Unos y otros aceptaron el trato. No obstante, durante el asedio sufrió daños, inevitablemente, y muchos ciudadanos de todo el mundo hicieron donaciones para la reconstrucción. Sus nombres están grabados en el adarve de las murallas.

Sitios que ver en Rothenburg ob der Tauber

Aunque puedes ver Rothenburg ob der Tauber a tu aire, sobre todo si vas en grupo te puede interesar este Tour privado con guía en español. En función del tamaño del grupo, el precio llega a ser una ganga, y es una excelente manera de conocer la rica historia (pasada y reciente) de una de las urbes más visitadas de Alemania.

Antiguas Murallas y Torres Defensivas

En función de si estás unas horas, o por el contrario sigues nuestra recomendación y pasas un día entero para ver Rothenburg, el recorrido por las Antiguas Murallas deberá ser más o menos duradero.

Un día completo en Rothenburg te permitirá dar la vuelta completa al recinto amurallado (unos 2’5 km más o menos), si vas de visita unas horas, dale prioridad a sus elementos más importantes.

Entenderíamos como lo más significativo de las murallas, lugares como Galgentor, Klingentor, Spitaltor, MarkusturmStrafturm o Rödertor. En esta última puedes subir y gozar de las vistas.

Si te da tiempo haz un paseo completo por el adarve, la pasarela que sigue las murallas por el interior. Te descubrirá puntos de vista e imágenes de postal.

Puerta de acceso y muralla en Rothenburg

CONSEJOS VIAJEROS. Es buena idea acercarse a las murallas de la zona sudoeste, donde están las torres Kalkturm y Sauturm. Verás un curioso puente doble, y es un tramo de muralla no muy concurrido donde los turistas llegan menos.

Plaza de Plönlein

Los frikies nos merecemos un alto especial en la Plaza de Plönlein.

Aquellos que jugasteis a la mítica aventura gráfica Monkey Island, debéis saber que una de las calles del videojuego está inspirada en Plönlein.

Y ahora que hemos hablado del principal motivo para ir y ver Rothenburg ob der Tauber en un día, podemos seguir con elementos secundarios, como por ejemplo, que la Plaza de Plönlein es una de las imágenes más fotografiadas de Alemania (por el juego, qué duda cabe).

Plönlein se traduciría como algo así como la pequeña plaza ante la fuente, y hace referencia tanto a las torres de la derecha e izquierda, como a la fuente.

Que ver Rothenburg un dia

Plaza de Plönlein

Marktplatz

Marktplatz es la plaza principal de Rothenburg ob der Tauber y su centro neurálgico. De una manera u otra, todas las calles parecen dirigirse allí.

Los edificios de los que te hablaremos seguidamente se encuentran todos en sus inmediaciones.

Tres bares y restaurantes con sus respectivas terrazas hacen las delicias de aquellos a quienes gusta relajarse en un ambiente agradable y con buenas vistas.

Ayuntamiento

El Ayuntamiento es un edificio imponente situado en Marktplatz, a caballo entre el gótico y el renacentismo.

El edificio blanco, aunque no lo parezca, también forma parte del Ayuntamiento, y, efectivamente, puedes subir a su torre más alta.

Tras 220 escalones, te sorprenderá una panorámica excepcional de Marktplatz, de la ciudad y del valle del río Tauber.

Ayuntamiento de Rothenburg

Fachada del Ayuntamiento de Rothenburg

Oficina de Turismo

Ojiplático estarás que te recomendemos pararte ante la Oficina de Turismo.

Además de información de utilidad y de un fabuloso plano indicativo, el edificio donde se ubica la Oficina de Turismo fue una cervecería para la gente de bien de la próspera Rothenburg. En su fachada pueden verse varios relojes mecánicos que lo convierten en un edificio singular e interesante.

Fachada de la Oficina de Turismo

Fachada de la Oficina de Turismo

Fleischhaus, Tanzhaus y Marienapotheke

Dos casas pegadas destacan sobre las demás construcciones, situadas a tu izquierda si llegas a Marktplatz desde Plönlein. Son Fleischhaus, Tanzhaus y Marienapotheke, una junto a la otra.

Un rincón cautivador y magnético que te hace sacar la cámara de fotos y buscar el mejor ángulo y la mejor imagen de forma incansable.

Herterichsbrunnen, Tanzhaus y Marienapotheke

Fuente de los Señores o Herterichsbrunnen

Frente a las dos casas indicadas, está la Fuente de los Señores, o Herterichsbrunnen.

La fuente es de estilo renacentista tardío, y se construyó en 1595. A su alrededor tenía lugar el mercado.

Fíjate en la figura en lo alto del pilar central, que representa una sirena con dos colas, y que sujeta un centro en su mano izquierda y lleva una corona.

Aquí se castigaba públicamente a los delincuentes.

Blasiuskapelle o Capilla de San Blas

Una de las cosas que debes ver en Rothenburg en un día es Blasiuskapell o Capilla de San Blas.

Se ubica donde estaba antiguamente el castillo, y se puede acceder gratuitamente al interior, que está en un estado de semi conservación.

Unos frescos y un pequeño vitral, dibujan la gloria pasada de uno de los edificios más antiguos de la ciudad, que hoy día hace la función de honrar a los caídos en las dos guerras mundiales.

Jardines del Castillo

Cerca de la Capilla de San Blas están los Jardines del Castillo, aunque como dijimos más arriba, lo que no está es el castillo.

Este pequeño rincón ofrece un lugar de descanso, y unas vistas inmejorables del valle del Tauber y de la propia Rothenburg.

Jardines del Castillo

Jardines del Castillo

Jakobskirche

Uno de los pocos edificios religiosos que cobra entrada.

Buena parte de la prosperidad de Rothenburg durante el medievo, se debió a Jakobskirche, pues el Altar Mayor conserva un relicario con un recipiente de cristal en cuyo interior se dice haber gotas de la sangre de Cristo. Muchos peregrinos se acercaban a venerar la reliquia.

Constructivamente su elemento más destacado es que una calle cruza por debajo de la iglesia, algo sumamente inusual.

El interior es más bien discreto, pero destacan los vitrales antiguos.

Museo de Delitos y Castigos medievales

Una morbosa exhibición de elementos de tortura de mayor o menor sadismo, que se utilizaban en la penalización de distintos delitos o conductas consideradas impropias: cinturones de castidad, jaulas, máscaras con pinchos, sillas con pinchos, y un largo etcétera de cosas con pinchos.

Además de la faceta morbosa, se hace una explicación didáctica de como funcionaban los procesos inquisitoriales, lo cual resulta educativo.

Museo de Delitos y Castigos medievales

Museo de Delitos y Castigos medievales

Reichstadtmuseum

De entre las cosas que ver en Rothenburg en un día, también destacamos Reichstadtmuseum, el museo de la ciudad.

Encontrarás objetos antiguos y elementos relacionados con el pasado histórico de Rothenburg, con explicaciones detalladas y educativas. Todo a un precio razonable.

Para los morbosos, también se exponen armas.

De entre otros elementos destacados: una antigua cocina que te teletransporta unos siglos atrás.

Que ver Rothenburg un día

Muralla y puerta de acceso

Tomar algo de noche

Siguiendo las indicaciones de una persona que vivía allí, decidimos salir a tomar una copa, porque nuestro viaje llegaba a su fin y lo merecíamos. Dimos con el pub llamado Mucho Amor, situado en Kapellenplatz.

No es muy grande y cierra pronto, pero es uno de los pocos lugares del centro histórico que permiten alargar la noche.

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