Tanto si viajas a China por libre, como si lo haces a través de un viaje organizado, la Muralla China debe ser un imprescindible cuando estés en Pequín, junto con la Plaza de Tiananmen y la Ciudad Prohibida.
La mejor forma de visitarla es desde la capital del país y debes considerarle la dedicación de medio día, como mínimo, y dependiendo de la zona que desees visitar, de un día completo. Más abajo intentaré explicarte un poco los distintos sectores de la Gran Muralla China que puedes ver, y como visitarlos por tu cuenta. Pero antes, un poco de preámbulo al que siempre tendemos los escribidores -que no escritores- para crear tensión ambiental o sencillamente porque nos gusta leernos y nos pierde la palabra. Si eres de los impacientes dale a los distintos apartados del resumen.
La Muralla China, historia y curiosidades
La Gran Muralla es una de las construcciones hechas por el hombre más impresionantes que existen. Y en su construcción se cruzaron zonas montañosas de difícil acceso y zonas desérticas. Las terribles condiciones de trabajo de las personas a las que se obligó a participar provocó numerosas muertes.
Sigue siendo considerada, tras sus revisiones periódicas, una de las Siete Maravillas, y es uno de los destinos turísticos más visitados del mundo, aunque teniendo en cuenta la población del país, se le debería discutir un poco el mérito.
Fue ideada por el primer emperador chino, Qin Shi Huang, quién unificó los distintos reinos chinos, y mandó construir la Gran Muralla China con la finalidad de protegerse de sus belicosos vecinos del norte. Evidentemente su construcción no se terminó con el emprendedor de Qin Shi Huang, sino que se fueron construyendo partes de la Gran Muralla China con posterioridad. De hecho, y para ser honestos, su construcción no se hizo desde cero, sino que se unieron distintos tramos ya existentes que separaban los distintos reinos chinos de la época.
Te lanzo algunos números y datos tan propios de los guías turísticos:
- Fue construida por campesinos, soldados y prisioneros, a quienes se obligó a hacerlo.
- La mayoría de restos existentes actualmente fueron construidos durante la Dinastía Ming (mientras hacían los bonitos jarrones).
- Tiene una amplitud de unos 6 metros en la base y un promedio de casi 8 metros de alto. La anchura de la calzada por la que puedes transitar, aunque varía en función del tramo, se pensó para recorrerla incluso a caballo si era necesario, y promedia unos 4 metros.
- Tiene una antigüedad de más de 2.300 años, lo que quiere decir que Jordi Hurtado vio poner la primera piedra.
- De todas las secciones, Badaling es la más visitada, y como consejo te diré que es de la que debes huir.
- No puede verse desde el espacio ni desde la Luna. Y Papá Noel tampoco existe.
- Es Patrimonio de la Humanidad desde 1987.
Cuanto mide la Muralla China
Como todo en esta vida, los expertos no se ponen de acuerdo respecto a su longitud. Aunque tampoco debe ser sencillo medir la Gran Muralla China, que se llama “Gran” por algo, y que zigzaguea por las montañas.
Un estudio reciente de la Administración Estatal del Patrimonio Cultural, cifra la longitud de la Muralla China en 21.196 km. Pero la cifra debe ser matizada, porque para llegar a esa cantidad brutal de kilómetros, que equivaldría a 5 veces la longitud de EEUU, tuvieron en cuenta todas las murallas construidas desde los Reinos Combatientes Chinos.
En 2012, la misma Administración hizo otro estudio en la que calculaba la longitud de la Gran Muralla en 8.851 km, pero una vez más, hicieron un poco de trampa. En este estudio medían barreras naturales como ríos, lagos o montañas.
Lo que entendemos por Muralla China, que es la construcción de la pared propiamente, se calcula en unos 6.200 km, y estos cálculos incluyen ramificaciones, porque no todo va en línea recta, sino que a veces la construcción se divide en dos ramales.
La longitud en horizontal, y prescindiendo de estas ramificaciones, se calcula en alrededor de 2.700 km. Un poco decepcionante partiendo de los primeros números, ¿no? Será que siempre tendemos a exagerar en cuanto a tamaño.
Qué tramo visitar de la Gran Muralla
Los sectores de la Gran Muralla China por excelencia son los siguientes:
- Badaling. El más fácilmente accesible desde Pekín y el más turístico. Se encuentra a unos 60 km de la capital.
- Mutianyu. El segundo más turístico, pero menos visitado, y una buena opción si quieres evitar la masificación de Badaling. Lo encontrarás a 70 km de Pekín.
- Jinshanling. Parcialmente restaurado, pero no tanto como los dos anteriores. Situado a unos 130 km de la capital. Entre este tramo y el siguiente existe la posibilidad de hacer un interesante trekking.
- Simatai. Sin restaurar y requiere buena forma física. Llévate comida y bebida suficiente.
- Jiankou. Al igual que Simatai, está sin restaurar, y es uno de los tramos más auténticos y recomendables. Aunque requiere preparación tanto física como de acopio de agua y comida. Esta parte de la Gran Muralla China conlleva un trekking hasta Mutianyu.
Puedes contratar un Tour Privado a las secciones de Badaling, Mutianyu, Simatai y Jinshanling. La gracia de la opción es que es para grupos, con lo que cuantos más seáis más económico saldrá.
No obstante, es posible visitar cualquier tramo de la Muralla China por tu cuenta, y te dejamos información seguidamente.
Recomendaciones generales
Si estás pensando en visitar la Gran Muralla China, además de calzado cómodo y crema solar si vas en verano, es conveniente que te lleves agua y comida. Solo Badaling y Mutianyu están bien preparadas con restaurantes, pero la cantidad de gente y los elevados precios te harán plantear que tu cuerpo necesite realmente ingerir alimentos. Nuestra recomendación es que cargues en una mochila con agua y comida calórica y poco pesada, como frutos secos, plátanos, alguna galleta, etc., y ello con independencia del tramo que elijas.
Si vas en invierno, abrígate un poco más porque la altitud causará más sensación de frío.
Todos los sectores los puedes visitar por tu cuenta con paciencia y adaptándote a los contratiempos que puedan salir, pero si prefieres un poco de comodidad puedes contratar alguna de las excursiones privadas con las que enlazamos. Ya lo irás viendo, pero China no es un país fácil para viajar: muy pocos hablan inglés y no solo entenderse con los habitantes es complicado, sino también entender los carteles y la información, por el tipo de escritura.
Por cierto, ningún tramo de la Gran Muralla es llano. Recuerda que va siguiendo un sistema montañoso, y sube y baja adaptándose a las irregularidades naturales del terreno. Aunque eso sí, hay tramos más fáciles que otros.
Cuánto vale visitar la Gran Muralla China
Esta información es relevante, evidentemente, solo si visitas la Gran Muralla por tu cuenta. Si lo haces con un tour, el precio se incluye.
Los accesos a cada tramo se pagan, pero no hay un coste único, y varían dependiendo de la zona y de la época del año. Resulta más caro en temporada alta.
Jinshanling, tiene un coste aproximado de 8€. Otras zonas como Badaling, Mutianyu o Simatai tienen costes aproximados de 5-6€.
En las zonas en las que hay teleférico, puedes usarlo por unos 5€ por un trayecto, u 8€, aproximadamente, ida y vuelta.
Los autobuses que llevan a cada tramo no son muy caros, y desde Pekín hasta la zona correspondiente pueden costar unos 2-3€.
Tendrás que añadirle el coste de taxi u otro transporte privado que elijas, y que te habrá de llevar desde la parada del autobús hasta el inicio del tramo.
No creo que la diferencia de unos pocos euros deba ser determinante en la toma de tu decisión. La diferencia de coste entre visitar por tu cuenta un sector de la Gran Muralla China u otro, apenas te va a suponer unos 5-10€ como mucho. Por ello mi consejo es que, tratándose de una de las Maravillas del Mundo, y sobretodo por su espectacularidad, elije el tramo que mejor te convenga o mayor interés te despierte.
Horarios
Las secciones abiertas al público suelen tener un horario de 7 u 8 de la mañana hasta las 17 de la tarde.
Los horarios de cierre pueden variar dependiendo de la temporada, y algunos tramos cierran más tarde. Es conveniente cerciorarse de la hora de cierre especialmente si vas a hacer un trekking Jiankou – Mutianyu o Jinshanling – Simatai. Si quieres ser previsor, piensa que la mayoría de lugares abiertos al público en China cierra a las 17:00, así que prevé tu llegada a destino con esta referencia.
Si vas en transporte público también te va a condicionar el horario de autobús de vuelta. Ten en cuenta que los últimos autobuses suelen partir de origen para llegar a Pekín, entre 18:30 y 19:00.
Aunque, atención, el último autobús desde Badaling sale a las 16:30 horas.
Badaling
Llegar a la Muralla China en Badaling
Para llegar a Badaling por tu cuenta toma la línea 2 del metro hasta llegar a Jishuitan (积水潭). Desde allí podrás llegar andando hasta la estación de autobuses Deshengmen (德胜们箭楼).
En esta estación, toma el bus 877 que te lleva hasta Badaling (八达岭).
Si combinas Badaling con las Tumbas Ming, hay un autobús que cubre la ruta Changling (长陵) – Badaling. Es el autobús número 879.
La sección de la Gran Muralla se encuentra a unos 60 km de la capital y puedes llegar en algo más de una hora, aproximadamente.
Tiempo de visita
Es posible verla en 1/2 día, por lo que se recomienda visitarla conjuntamente con las Tumbas Ming.
De hecho, y puesto que la mayoría de gente lo hace al revés, es conveniente visitar las Tumbas Ming por la mañana y Badaling por la tarde.
Valoración
Badaling es la sección que uno se imagina cuando piensa en ver la Muralla China, porque es la que con más probabilidad ha visto en fotografías o vídeos.
Badaling
Está rodeada de bosques, con lo que la belleza del paisaje se acrecienta.
Tiene a su favor que es de fácil acceso, sin grandes desniveles (los hay, pero no son grandes), y la opción ideal si uno no quiere hacerse una caminata. También es una buena alternativa si quieres economizar tu tiempo, aunque la saturación de turismo chino no es fácil de sobrellevar. Es tan turística que antes de subir podrás encontrar numerosos restaurantes, entre ellos un McDonald’s. Y aquí ya está todo dicho.
A los chinos no les gusta hacer cola, ni tienen “cultura de cola”. Que sean los últimos en llegar no quiere decir que vayan a ser los último en entrar, eso depende de si se pueden colar. Así que prepárate para empujones y gente colándose de la forma más descarada que te puedas imaginar. Toda tu picardía será poca ante unos profesionales del quiebro, la bicicleta y el salto con chancla.
De todas formas, al llegar a la Gran Muralla es importante, para esquivar la masificación de gente, alejarse de la entrada hacia el extremo más alejado.
Mucha de la gente que visita esta sección va en familia o con gente mayor, así que no les apetece andar y no se apartan demasiado de la entrada. Si quieres un poco de tranquilidad relativa, que no te de pereza y aléjate de la muchedumbre-zombie tanto como puedas.
También debes saber que Badaling dispone de un teleférico para subir o bajar, aunque te recomendaría que al menos una de las dos cosas la hicieras a pié.
Otra opción para el descenso es una especie de telesilla que también tiene su punto.
Como curiosidad, en esta sección hay una inscripción en chino (que no vas a entender), pero que vas a ver que muchos nacionales le hacen fotos. Se trata de un verso de Mao Zedong (también escribía poesía), que viene a decir algo así como que “quien no visita la Gran Muralla no es un buen hombre”, entendiendo “buen”, no como buena persona, sino como machote. Hay qué ver como te pican estos chinos.
Como ya hemos dicho, atención, porque el último autobús desde Badaling hasta Pekín sale a las 16:30 horas.
Mutianyu
Para visitar este tramo de la Muralla China, puedes contratar tu Tour a Mutianyu desde tu casa, a un precio bastante razonable. También puedes combinar esta sección con las Tumbas Ming, en un Tour del que puedes obtener información aquí.
Mutianyu
Llegar a la Muralla China en Mutianyu
Si prefieres ir por tu cuenta, aquí va la información: para llegar a Mutianyu debes ir a la estación de metro de Dongzhimen (东直门), donde puedes llegar con las líneas de metro 2 y 13.
Además de estación de metro, Dongzhimen es también una estación de autobuses. Allí puedes tomar dos autobuses: 867 que solo hace viajes de marzo a noviembre, o el 916, que circula todo el año y te llevará a Huairou, donde al bajarte se te acercarán una manada de lobos chinos sedienta de sangre de cordero occidental. Traducido significa que se van a pelear por tu dinero, y que te propondrán llevarte hasta Mutianyu.
Desde Hairou hay microbuses públicos que te pueden llevar hasta la sección de la Gran Muralla que quieres visitar, pero dejarse convencer por algún particular que se ofrece a llevarte puede ser una opción recomendable, puesto que te estarán esperando a la bajada y no dependerás de ningún autobús. Además irás más ancho.
Se encuentra a unos 70 km de Pekín y tardarás 1 hora y media en llegar.
Tiempo de Visita
Puede hacerse en algo más de medio día.
Valoración
Es también bastante turística y está totalmente reformado, pero no tan masificado como Badaling. Requiere una leve mejor forma física, pero nada exagerado. Y total, si quieres sentarte, te sientas, y si quieres parar, te paras.
Mutianyu
Es una buena opción si quieres evitar sentirte parte de un rebaño, pero tampoco te apetece una aventura asalvajada. Además, la sección restaurada es bastante más larga que Badaling, y te ofrece la posibilidad de darte un buen paseo mientras visitas la Muralla China.
A su favor también cabe decir que arquitectónicamente tiene más torres de defensa, lo que le da una apariencia más hermosa que Badaling. Y al igual que su popular “hermana” está rodeada de bosques.
Dispone de un teleférico, y para el descenso, también de un divertido tobogán, en el que te montas en un carrito con ruedas que desciende por una vía parecida a un circuito de bobsleigh, para que te hagas una idea.
Si tuviera que mojarme optaría por Mutianyu antes que Badaling, además de forma bastante indudable. Los argumentos decisivos, para mi, son: que la sección es mucho más larga, igual de hermosa, igual de sobrecogedora, y con menos gente. Quizás puede resultar algo más complicado llegar, pero si te preocupa esto, intenta contratar la visita con antelación.
Ruta Jiankou – Mutianyu
Llegar al tramo de Jiankou
Si quieres ver y recorrer esta parte de la Gran Muralla China por tu cuenta, para llegar a Jiankou debes hacer exáctamente lo mismo que para ir a Mutianyu: tomar el bus 916 en Dongzhimen (东直门) hasta Huairou (怀柔北大街).
Recuerda que Dongzhimen tiene estación de metro, también, y es parada de las líneas 2 y 13.
Al bajar en Huairou tendrás a los feroces devora turistas queriendo mordisquear tu pálida y tierna carne. Déjate querer haciéndote el duro, y alguno te llevará hasta el lugar donde se inicia la ruta. Tendrás que negociar el precio.
Si encuentras más incautos queriendo hacer la misma ruta, procura sumarte a ellos para repartir el gasto del transporte. Un coste total de unos 10.€ sería algo razonable.
Tu transporte privado te llevará hasta un lugar con algunos restaurantes, y una especie de piscina artificial donde los nacionales pescan con cañas hechas a mano (no es para bañarse).
Allí verás que se inicia el camino cuesta arriba y se adentra en el bosque.
Al poco de seguir el sendero empezarás a encontrar cintas rojas atadas a los árboles y arbustos, que van marcando el camino.
Además de una flecha (roja), en la parte superior izquierda puedes ver uno de los lazos que te indican el camino
Tiempo de ruta
Hasta llegar a este sector de la Gran Muralla China tienes un trayecto ascendente de unas 2 o 3 horas.
Una vez en la Gran Muralla, deberás andar durante unas 3 horas más hasta llegar a Mutianyu.
En lo alto se ve alguna torre algo borrosa
Valoración
Y para mi, esta es la joya de la corona.
Torre de Vigilancia medio derruida
Fue el tramo que elegimos nosotros, aunque como he dicho al hablar de nuestro Viaje a China, la elección fue involuntaria y a última hora.
El ascenso es muy duro, vas siguiendo una trayectoria ascendente durante algo más de dos horas, y al final llegas a la Gran Muralla, a la que puedes subir ayudándote de una escalera rudimentaria hecha de sogas y troncos.
Es imprescindible llevar agua y comida y estar en buena forma física.
Al llegar a tu preciado destino, darás gracias a dioses en los que no crees, y te sentirás más maravillado si cabe por el esfuerzo que supone llegar.
Pero como que esto es China, te espera una sorpresa cuando pongas los pies en la Gran Muralla, y es que un local pretenderá cobrarte entrada con un coste aproximado de 1 o 2.€. Puedes pagarle o no, pero nosotros lo hicimos.
Lugar de acceso a la Gran Muralla en Jiankou donde una persona local tiene montado un puesto para vender agua – y cobrar entrada-.
Como que tu capacidad de carga de provisiones es limitada, es posible que una vez arriba te hayas bebido toda el agua que llevabas, pero el chino que cobra entrada, también cobra por venderte agua, y este es un motivo más para pagarle y tenerle contento.
Una vez estés en la Gran Muralla, te quedará una ruta aproximada de 3 horas hasta Mutianyu. Es cierto que una vez llegues a la imponente maravilla el trayecto no es demasiado dificultoso, si bien hay algunos tramos de subida y bajada complicados. Pero estos tramos son cortos.
Borde del Cuerno del Buey
Especialmente complicado es el descenso por el tramo llamado Cuerno del Buey. Subir es cansado, y a menudo tienes que ayudarte de las manos, pero la bajada es aún peor. Las piedras son resbaladizas, y la cuesta muy empinada. Tanto que tienes que ir sujetándote con una mano a las aspilleras y almenas del muro, bajo riesgo de una caída en la que difícilmente podrías detenerte. Mientras bajaba, no dejaba de pensar como carajo se movían por allí los antiguos chinos sin sus zapatos Mizuno o Salomon y sin partirse el coxis.
La Gran Muralla China está cubierta por vegetación, pero se puede transitar
Accederás a Mutianyu saltando un muro que advierte que el tramo del que vienes tiene prohibido el acceso, lo que te hará sentirte más peligroso que Van Damme. Una vez en Mutianyu puedes bajar hasta la entrada de la zona, donde, si así has quedado con el conductor que te llevó desde Huairou, te estará esperando para volverte al mismo lugar donde te recogió.
Aunque es un tramo duro, realmente duro, es muy recomendable, y te ofrece la posibilidad de andar prácticamente solo por la Gran Muralla China durante varias horas, lo que te provoca una sensación de plenitud difícilmente igualable en cualquier otro sector. Realmente es una opción muy recomendable si vas a hacer la visita por tu cuenta.
Tramo de Mutianyu
Desde Jiankou hasta Mutianyu, la Muralla China está bastante deteriorada, y también sus torres de vigilancia. La vegetación ha crecido y ha devorado parte de la construcción, pero ese aspecto asalvajado te da una sensación de ser un pionero, una especie de descubridor con tu ropa fosforita del siglo XXI y comprada en Decathlon.
Por otro lado, esta opción te ofrece también la posibilidad de visitar Mutianyu, que es un añadido nada desdeñable.
Jinshanling
Llegar a la Gran Muralla en Jinshanling
También puedes hacer este tramo de la Gran Muralla por tu cuenta. Para ello, toma las líneas 13 o 15 del metro hasta llegar a Wangjing Oeste (城铁望京西站). A la salida encontrarás un autobús con destino a Luanping. Ése es el transporte que debes tomar, pero ten en cuenta que el trayecto del autobús no finaliza en Jinshanling, por lo que debes apearte en la parada del Area de Servicio de Jinshanling. Allí podrás tomar un bus gratuito hasta llegar a la entrada de la Gran Muralla.
Necesitas unas 2 horas para llegar, y está a unos 130 km de la capital.
Interior de Torre Defensiva
Tiempo de visita
Jinshanling dispone de varias rutas, con dificultad y duración variable.
Las distintas alternativas van desde la más sencilla, con una duración aproximada de hora y media, hasta la más larga con un tiempo estimado de 4 horas.
Desde Jinshanling cabe la opción de hacer un verdadero trekking hasta Simatai, pero con tu permiso esta opción te la cuento seguidamente. Aunque sí debes saber que si ésta es tu alternativa, cuenta con que vas a invertir el día completo.
Valoración
Entre las opciones Mutianyu o Badaling, totalmente restauradas, y los dos trekkins, totalmente salvajes, tenemos Jinshanling, un término medio y una buena alternativa para visitar por tu cuenta la Gran Muralla.
De entre los lugares acondicionados, este es el menos visitado por los turistas.
Conserva buena parte de los elementos originales, y es un atractivo especial por sus torres de vigilancia de diferentes características, que se adaptan a las circunstancias del terreno. Las hay ovaladas, cuadradas, hechas con ladrillos, madera y piedra, etc.
Como te he dicho más arriba, hay diversas rutas por hacer, y la más larga de las opciones requiere una razonable capacidad física, con tramos en los que recorrer la muralla requiere incluso ayudarse de las manos y trepar a gatas.
Por otro lado, no es extraño encontrar locales vendiendo comida o bebida en las torres de vigilancia, pero es conveniente que no te confíes y que te aprovisiones debidamente.
Dispone también de teleférico.
Como curiosidad de esta sección, puedes hallar gran cantidad de ladrillos con caracteres, grabados con la fecha y las tropas destinadas a la Muralla China que las hicieron.
Así mismo, y en el tejado de una torre que se sitúa entre las Torres llamadas “de las Cinco Ventanas” y “de las Tres Ventanas”, y como un hermoso tesoro escondido, está el llamado Muro Kylin. Se trata de un grabado que decora una parte del muro del tejado, y en el que se puede ver a un ser mitológico rodeado de nubes. Por lo demás, la torre pasaría inadvertida. Es cierto que no tiene escaleras para acceder al tejado, pero no resulta tan difícil ni peligroso trepar, y si te gustan las curiosidades es agradable subir, observar las vistas, y hacerle una foto a una imagen que lleva allí unos cuantos cientos de años y que pasa inadvertida para la mayoría de turistas.
Ruta Jinshanling – Simatai
Desde donde empezar
Se recomienda hacer la ruta Jinshanling – Simatai y no al revés por varios motivos. El primero y más importante es que la parte más dura la superarás al principio, cuando estás fresco. Y también para evitar que alguien te ponga pegas para cruzar la zona no permitida en Simatai.
Evidentemente, partiendo desde Jinshanling, la forma de llegar es la misma que para esta sección.
Una vez en Jinshanling, debes ir al este y seguir la Gran Muralla para ir hacia Simatai.
Tiempo de ruta
La distancia aproximada es de unos 10 km, que tardarás unas 4 horas en recorrer.
Valoración
Es absolutamente vital llevarse comida y agua suficiente.
Es un trekking duro, con pronunciados desniveles por una parte de la Gran Muralla sin restaurar, en la que te encontrarás vegetación que ha crecido entre los ladrillos. A menudo incluso deberás ayudarte de las manos para trepar porque sigue los desniveles naturales del terreno. Por ello, es un buen lugar si quieres visitar la Gran Muralla sin turistas.
Se recomienda prestar mucha atención y no descuidarse a lo largo del recorrido.
La recompensa pero también es gigantesca, y no es en balde que tiene la fama de ser uno de los tramos más hermosos de la Gran Muralla.
Andarás por la Muralla China en práctica soledad, y seguro que te hará sentir ínfimo el pensar en los millares de manos que, sin herramientas mecánicas, levantaron ése muro enorme.
Simatai
Llegar a la Gran Muralla en Simatai
Para llegar a este sector de la Gran Muralla por tu cuenta necesitarás algo más de dos horas, y se encuentra a unos 120 km de Pekín, aunque también puedes hacerlo con un trekking desde Jinshanling.
Para ir directamente, ve a Dongzhimen (东直门), adonde puedes llegar con las líneas de metro 2 y 13, si no lo han cambiado de lugar en lo que he tardado en escribir la forma de llegar a Jinshanling. Una vez allí, toma el bus que lleva a Gubei Water Town, y de allí toma un taxi hasta la entrada de Simatai.
Tiempo de visita
Si vas a visitar sólo Simatai y tomas el mismo camino de ida y vuelta, vas a invertir algo más de medio día.
Valoración
Simatai ha sufrido pocos cambios en los últimos cientos de años. Los únicos trabajos de reparación han sido los básicos de refuerzo de la estructura, y la Gran Muralla se encuentra en su estado original, y es poco visitado por el turismo.
Dispone de un teleférico, y también de la posibilidad de hacer una impresionante visita nocturna, para la que debes ir preparado con linternas u otros artilugios del estilo.
El recorrido es bastante exigente físicamente, con pronunciados desniveles, si bien las vistas son realmente espectaculares.
Sólo está abierto al público un recorrido de 10 torres. El resto se considera peligroso, y en el concepto de este “resto peligroso” se encuentra el trayecto desde Jinshanling.
Por otro lado, el número de entradas diarias que se emiten es limitado, por lo que es conveniente reservar si quieres visitar esta sección. Evidentemente, si eres un infractor por naturaleza y vienes de Jinshanling, no te hará falta ticket. Para la reserva, te recomiendo que pidas una ayudita (que diría Flanders) al personal del hotel.
Al igual que en Jinshanling, en esta sección de la Gran Muralla encontrarás ladrillos con inscripciones hechas por soldados que estuvieron destinados a su custodia. Serían algo así como la “Guardia de la Noche”, pero versión china.
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